Por Moisés Zúñiga

Sin duda, unos de los trabajos que trae consigo grandes peligros son las actividades realizadas en el sector eléctrico. Si bien es cierto que la taza de accidentes eléctricos es baja en consideración a otros trabajos, por lo general, estos accidentes suelen ser graves y en algunos casos, lamentablemente fatales.

Dado lo anterior, la prevención toma un rol fundamental al momento de definir la intervención segura de los operarios que realicen trabajos que impliquen un alto riesgo de electrocución, por lo que cada implemento de seguridad se vuelve necesario e indispensable para cumplir con total protección al momento de un potencial accidente.

Para el mantenimiento de líneas energizadas o desenergizadas siempre se aplica el mismo principio: “la seguridad es primordial”. Muchas personas creen que el mantenimiento de líneas desenergizadas es mucho más seguro y en algunos casos pueden serlo si se encuentran protegidos por sistemas de puesta a tierras temporales (SPT), sin embargo, siempre se encuentra la posibilidad de accidentes si estos sistemas de puesta a tierra temporales son inadecuados.

Dicho esto, cada equipo de protección personal debe reunir una serie de requisitos para ser bien definido o especificado cumpliendo fielmente características que aseguren un óptimo funcionamiento. Para ello existen normas en la industrias y políticas de empresas que nos permiten simplificar la selección de componentes de los sistemas de puesta a tierra temporales. 

Las puestas a tierra nos garantizan una zona de trabajo seguro, por lo tanto, estos equipos deben estar bien dimensionados para la intensidad de cortocircuito que soportan.

La normativa ASTM F855, nos permite designar y escoger cada componente según corresponda, ya sea, grampas, ferrules, conductor y establecer el sistema completo. Además, la tabla 6 de la OSHA nos advierte de las distancias mínimas que se debe respetar al momento de instalar una puesta a tierra.

Por otra parte, el cuidado de los equipos siempre es importante. Si bien es cierto que las normas no obligan a realizar mantenimientos y pruebas de ensayos a estos equipamientos, la normativa si lo “recomienda”, por tanto, las empresas han adoptado políticas internas donde se auto-obligan a realizar mantenimientos y ensayos en un periodo que estimen conveniente, por ejemplo, cada 1 año.

TRENT actualmente presta estos servicios, la mantención de puestas a tierra es realizada en un taller especializado que cuenta con gran variedad de stock de repuestos CHANCE para hacer todo tipo de reparaciones. Por otro lado, las pruebas de ensayos no son realizadas propiamente tal por TRENT, si no por un socio estratégico especializado en estos tipos de actividad: LABENS.

El trabajo complementario entre ambas empresas garantiza que los equipos cumplan su funcionalidad óptimamente, con el fin de asegurar la protección de los operarios que intervengan las redes eléctricas.

Si quieres saber más de los sistemas de puesta a tierra temporales, puedes revisar el webinar que realizamos hace un tiempo, ¡haz clic acá para verlo!

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